Mark Zuckerberg, fundador y CEO de Meta, quiere ir un paso más allá en el uso de la inteligencia artificial y promete revolucionar la industria publicitaria con infinitas herramientas creativas.
En una entrevista para Stratechery, el líder de Meta ha explicado cómo la IA ha ayudado a mejorar la fragmentación de anuncios y ha adelantado que su próximo proyecto consistirá en administrar el proceso creativo de principio a fin.
«Llegaremos a un punto en el que, como empresa, acuden a nosotros, nos dicen cuál es su objetivo, se conectan a su cuenta bancaria, no necesitan creatividad, ni segmentación demográfica, ni ninguna medición, excepto para poder interpretar los resultados que mostramos. Creo que esto será enorme; creo que representa una redefinición de la categoría de publicidad», ha asegurado Zuckerberg en relación a sus clientes.
En la práctica, estas palabras se traducirán en la reformulación de todo el sistema publicitario tal y como lo conocemos a día de hoy. Cualquier empresa podrá ponerse en contacto con Meta y pedirle clientes para un determinado producto. El equipo de Zuckerberg se encargaría del resto: crear las imágenes y vídeos, escribir los textos relacionados con el servicio, integrarlos en anuncios, redirigir al público hacia ellos, medir su impacto… En definitiva, mediante el uso de la inteligencia artificial, se completaría todo el ciclo.
«Es básicamente el agente comercial definitivo, y si piensas en las piezas publicitarias, está la creación de contenido, la creatividad, está la segmentación y está la medición, y probablemente las primeras piezas que empezamos a construir fueron las mediciones para básicamente lograr que pudiéramos tener efectivamente un negocio organizado en torno a cuándo estamos entregando resultados a las personas en lugar de solo mostrarles impresiones», ha explicado el CEO de Meta.
Las voces críticas no se han hecho esperar y profesionales del mundo de la publicidad han cargado contra Zuckerberg. Las agencias de publicidad han estado invirtiendo fuertes cantidades de dinero en herramientas que les permitan auditar los resultados que ofrecen estas grandes plataformas y esto acabaría de un plumazo con esa constatación. Ahora, el proyecto de la multinacional, en el que los anunciantes confiarían ciegamente en los resultados que les brinde, sin intermediación ni validación, genera dudas, miedo y escepticismo.
La realidad es que ahora mismo Meta ya ofrece este servicio a pymes que no pueden permitirse acudir a las grandes agencias y falta por ver si esta creatividad sin límites que ofrece la IA funcionaría en compañías de mayor tamaño y si éstas estarían dispuestas a dejar en manos del gigante tecnológico todo un proceso que está íntimamente ligado a su imagen.
Por el momento, la idea de Zuckerberg ya abre la puerta a una reconfiguración de la publicidad, en la que la inteligencia artificial asume una función relevante en la producción, optimización y dirección de las campañas.