Sonnedix lleva años demostrando que hablar de sostenibilidad no es una moda, sino un modelo de negocio. La empresa global de energías renovables ha vuelto a obtener la máxima calificación de cinco estrellas en la evaluación GRESB de infraestructuras, consolidando su papel como referente mundial. Un reconocimiento internacional que también se deja sentir en lo local: desde la creación de empleo rural hasta proyectos educativos y ambientales en España y Portugal.
La compañía gestiona más de 330 plantas solares en territorio español, con una capacidad instalada superior a 1,2 GW. Su estrategia pasa por integrar sostenibilidad y rentabilidad como dos caras de la misma moneda. Entre sus hitos destaca Sonnedix Covatillas, en Cuenca, con 150 MW de potencia y más de 200 empleos generados durante la construcción. En el norte de Portugal brilla Sonnedix Douro, su mayor instalación europea, que combina energía solar, almacenamiento y eólica para generar 230 GWh al año.
Ocho años de reconocimiento global
«La consistencia es la base de la confianza, y obtener por octava vez el reconocimiento de GRESB demuestra que la sostenibilidad forma parte esencial de todo lo que hacemos», explica Axel Thiemann, CEO de Sonnedix. «Este liderazgo global se traduce en un impacto positivo real en las comunidades locales donde operamos», añade.
España se ha convertido en un laboratorio solar europeo: la fotovoltaica ya representa el 14% del mix eléctrico nacional, según Red Eléctrica. En 2023 evitó más de 20 millones de toneladas de CO₂, según el IDAE. Dentro de ese escenario, Sonnedix refuerza el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) fomentando la contratación local y la integración ambiental. En 2025, su planta El Carrascal recibió el Sello de Sostenibilidad de UNEF por incluir vegetación autóctona, proveedores locales y compatibilizar actividad agrícola y energética.
Compromiso con la educación y la biodiversidad
Su compromiso no se detiene en los megavatios. Sonnedix promueve visitas escolares, talleres universitarios y actividades interactivas con la meta de alcanzar un millón de estudiantes antes de 2030. También protege la biodiversidad: crea pantallas vegetales, cajas nido, hoteles de insectos o reservorios de agua para anfibios en Castilla-La Mancha. Incluso ha respondido a emergencias, como las inundaciones de la DANA en Valencia, suministrando bombas de agua, equipos de limpieza y material escolar.
«Nuestro compromiso con España y Portugal va más allá de la producción de energía limpia: queremos ser un motor de desarrollo económico, ambiental y social sostenible», afirma Gerson González, director de Sonnedix España. No son palabras vacías: la empresa ha sido reconocida como Gold Solar Diversity Champion por SolarPower Europe y ha logrado una puntuación perfecta de 100 sobre 100 en GRESB por tercer año consecutivo.
Expansión global y mirada al futuro
Con más de 600 proyectos en diez países y una capacidad total de 11,8 GW, Sonnedix sigue ampliando su huella global. Colabora con grandes actores industriales como Renfe o Equinix y avanza hacia soluciones híbridas que combinan energía, tecnología y comunidad. Una forma de recordarnos que, en tiempos de transición energética, hay compañías que no solo miran al sol, sino también al futuro.
 
				 
				 
				 
				 
				
 
						 
					 
										 
										 
										 
										 
										