¿Por qué dar este paso de lanzar un fondo de capital riesgo?
La gestora de Afi está orientada a inversores institucionales. Queremos posicionarnos en activos singulares, no en activos tradicionales y para nosotros todo el mundo de la sostenibilidad y de las finanzas sostenibles es absolutamente estratégico. Creemos que hay un nicho, un hueco que no está cubierto en el mercado y que demandan los inversores: el mundo del impacto social. Por tanto creemos que es un buen momento para lanzar un fondo de capital riesgo que invierta en empresas que tengan un impacto social o medioambiental medible.
Bolsa Social Impacto pretende ir un paso más allá de la ESG, pretende ir a ese nicho de la inversión de impacto. ¿Es excesivo el auge de todo lo relacionado con la inversión ESG?
Nosotros en Afi llevamos desarrollando todo este análisis o consultoría en el mundo de la sostenibilidad desde hace dos/tres años y hemos visto un interés absolutamente creciente de manera exponencial entre los inversores. Nuestra visión es que los inversores están respondiendo a lo que está demandando la sociedad, los bancos están respondiendo a lo que están demandando sus clientes, las compañías de seguros a lo que demandan sus asegurados, las mutuas sus mutualistas… Al final, la sociedad está empujando a estos inversores institucionales a acometer sus políticas de sostenibilidad y creemos que es una industria que va a seguir creciendo porque la sociedad crece en estos valores.
¿Qué papel jugará La Bolsa Social en la gestión del fondo?
Nos hemos aliado con el fundador de La Bolsa Social, José Moncada, porque creemos que la clave en este tipo de fondos es el origen de las operaciones, dónde buscar esas empresas en las que invertir. Por eso nos hemos aliado con la persona que lleva cinco años liderando todo este mundo del emprendimiento social en España. La Bolsa Social está por un lado y el fondo por otro, son dos cosas que irán por separado, nuestra alianza es con José Moncada, quien se incorpora como director del fondo. Creemos que es él quien nos va a proporcionar todo ese conocimiento de la medición de impacto y el acceso a las oportunidades de inversión.
El inversor español es de perfil conservador, ¿está preparado para dar este paso hacia un producto diferente, ilíquido y a 10 años vista?
Va a costar, pero ya tenemos mucho cliente institucional que está empezando a incluir específicamente en su estrategia la necesidad de incorporar un porcentaje de inversiones alternativas. Y dentro de esas inversiones alternativas no tradicionales se incluyen los fondos de capital riesgo. Una queja sistemática de la industria del capital riesgo es que han tenido que hacer sus levantamientos de capital tradicionalmente fuera de España porque los inversores institucionales españoles, salvo algunas excepciones, no invierten en este tipo de productos. Sin embargo, hemos visto un cambio claro de mentalidad. El contexto actual de tipos de interés exige que todos estos institucionales se metan sí o sí en activos alternativos y, por tanto, sí creemos que si juntas ese carácter de activo alternativo con el carácter de impacto social, se hace el producto más atractivo. No vemos que el hecho de que sea un fondo cerrado e ilíquido sea una barrera para el desarrollo del instrumento.
¿A qué rentabilidad se puede aspirar con este fondo?
La métrica estándar de mercado de este tipo de producto habla de una rentabilidad del entorno del 6 por ciento anual después de comisiones. Sin embargo, además de esta rentabilidad financiera, está la rentabilidad social. Esto es difícil de trasladar a un número, pero es otro de los objetivos que persigue el fondo.
Hay quien señala que hay un “boom” del capital riesgo e incluso que el actual frenesí por las start-ups hace que puedan ser la nueva burbuja.com…
La industria del capital riesgo ha crecido significativamente en España y a nivel mundial en los últimos años, tanto en términos de inversión como de levantamiento de fondos. El boom en levantamiento de fondos se debe al contexto mundial de bajos tipos de interés y de escasa rentabilidad en activos tradicionales, lo que exige que los inversores busquen otras oportunidades.
En relación a cómo están invirtiendo las entidades de capital riesgo también estamos asistiendo tanto en España como en la mayor parte de los países desarrollados a máximos en los niveles de inversión. A esto ayuda un entorno económico en España relativamente favorable, ayuda un entorno de tipos que permite apalancar las operaciones y ayuda la necesidad de estos fondos de colocar esos niveles de liquidez que han captado. Todo esto está llevando a que se pueda estar vislumbrando que en determinados sectores, en determinadas operaciones o en determinadas transacciones se estén pagando múltiplos excesivamente elevados. Nosotros consideramos que sí que puede darse esto en algunos sectores, por lo que ahí la clave está en que el gestor de capital riesgo sea capaz de mejorar realmente el rendimiento de la compañía, con el objetivo de que cuando desinvierta pueda generar su rentabilidad no con la expansión del múltiplo de entrada -que ya ha sido muy alto- sino con la mejora del rendimiento de la compañía. En definitiva, ese riesgo de burbuja en determinados sectores obedece a una creciente competencia por parte de fondos nacionales y extranjeros por entrar en operaciones que hace que sobrepaguen algunas compañías y que haya riesgo de que no sean capaces de obtener las rentabilidades que esperaban.
2019-11-23 23:06:01