El compromiso de la Unión Europea (UE) con la transición tecnológica y verde sigue firme, según ha comentado Valdis Dombrovskis, comisario europeo de Economía, en el marco del Fórum Europa en Bruselas y subrayó que la UE busca simplificar la regulación para impulsar la competitividad sin comprometer los derechos de los ciudadanos y trabajadores.
Dombrovskis ha querido resaltar que ese esfuerzo de simplificación supone uno de los «grandes desafíos» de la Comisión Europea, y ha afirmado que «preservar nuestra prosperidad y nuestra seguridad no nos deja otra opción».
El comisario europeo ha recordado que la Brújula para la Competitividad de la UE tiene como objetivo de reducir la carga administrativa en un 25% para las empresas y un 35% para las pymes. Dombrovskis reconoció que la normativa actual y la burocracia están limitando la competitividad europea frente a potencias como Estados Unidos y China. Declaró que
«Primero necesitaríamos hacer la UE un lugar más sencillo para crecer en innovación, un lugar mejor para invertir y hacer negocios más baratos, con costes de energía más baratos y menos carga regulatoria», ha asegurado.
Regulación con valores
Dombrovskis enfatizó que la agenda de simplificación cubrirá todos los sectores, y cada comisario será responsable de su área específica. Este enfoque busca fortalecer a las «empresas que compitan internacionalmente», al tiempo que se reconoce que «las reglas de competencia europeas a veces crean problemas» por lo que apuesta por encontrar un equilibrio correcto.
El comisario aclaró que «no estamos comprometidos en una desregulación y no entraremos en una carrera desreguladora», asegurando que «la simplificación es muy importante para nuestra competitividad, fortaleza y liderazgo industrial».
El líder europeo recalcó que cualquier avance en simplificación normativa se realizará respetando los valores europeos, sus estándares laborales y compromisos internacionales. Estas declaraciones se producen en un momento de tensiones comerciales con Estados Unidos, Dombrovskis definió a la UE como una «economía abierta en la que el porcentaje del comercio es importante».
El enfoque verde de la UE contrasta abiertamente con las políticas impuestas por Donald Trump desde que llegó a la Casa Blanca el pasado mes de enero. Tras iniciar su nuevo mandato, el presidente estadounidense ha echado por tierra cualquier iniciativa de sostenibilidad poniendo así fin al nuevo pacto verde de Biden y anunciando la retirada de los EE.UU. del Acuerdo de París.
